Cataratas Argentinas

Cataratas Argentinas
"La patria, es mi infancia"
Lo que sucede a diario, relatos de lo cotidiano, de lo fantastico. Los anhelos, los recuerdos, lo que vemos, escuchamos, tocamos, degustamos, olfateamos.
La vida, el amor, la musica, los colores.

El llanto, la risa, los estímulos, las criticas.
La amistad, el futbol, la niñez.

Perico

Perico
"Para mirar las últimas entradas pinchar sobre el perico"

martes, 5 de mayo de 2009

Facundo Cabral


En el lejano 1983 con el incipiente nacimiento de la democracia, dos cantantes, entre muchos otros, volvieron a la popularidad con gran virulencia. Ellos fueron Facundo Cabral y Víctor Heredia.
A Víctor tuve el placer de verlo desplegar diversos trabajos a través del tiempo.
En cambio, Facundo… desde que lo viera en el viejo y querido Luna Park en esos primeros años de oxigeno democrático, pasando por ese dueto con Alberto Córtez del que fui testigo en el teatro Avenida, hasta el sábado a la noche en que volvió a la carga con una versión aggiornada de Ferrocabral en el ND Ateneo; me da la sensación que siempre expuso el mismo espectáculo, con pequeñas variaciones.
No obstante esta cariñosa crítica, cada vez que me llegaron sus ocurrencias, sus ingeniosas frases, logró que una sonrisa esperanzadora se dibujara en mi rostro.

A continuación reflejo algunas locuciones y pensamientos que Facundo transmitió y aún discursa en sus presentaciones.

“ Dios tomó forma de mendigo y bajó al pueblo para acercarse a la casa del zapatero en que le dijo: “ Hermano, soy muy pobre, no tengo una sola moneda encima y mis sandalias están rotas, si tu me hicieras el favor.” A lo que el zapatero le respondió: “ Aquí todo el mundo viene a pedir y nadie a dar.” Dios le dijo: “ Yo puedo darte todo aquello que tú necesites.” ¿ Tú podrías darme un millón de dólares para que yo fuera feliz?. Yo puedo darte diez veces más que eso a cambio de algo; a cambio de tus piernas. A lo que el zapatero le respondió: “ Para qué quiero yo diez millones de dólares si no voy a poder caminar sólo”. Puedo darte, continuaba el Señor, cien millones de dólares a cambio de tus brazos. El zapatero, inquieto le dijo: “¿ Qué puedo hacer yo con cien millones de dólares si no voy a poder comer solo?.” El Señor le hizo la última tentativa al zapatero. Te voy a dar mil millones de dólares a cambio de tus ojos. El zapatero, asustado ante el mendigo le respondió: “ Qué hago yo con mil millones de dólares si no puedo ver a mi mujer, a mis hijos, a mis amigos.” El señor le dijo: “ Ah, hermano, hermano, qué fortuna tienes y no te das cuenta”.

“ Mi sobrino escuchó a su padre que un día le dijo: “ Siéntate ahí que vamos hablar del sexo.” Mi sobrino, con doce años, se quedó mirando a su padre y le dijo: “ ¿Qué quieres que te explique, papá?”

“ Un campesino chino me dijo un día: “ Si quieres ser feliz un día emborráchate, si quieres ser feliz una semana, cásate, y si quieres ser feliz toda la vida, se jardinero.”

“ La señora Indira Gandhi le encantaba desayunar conmigo, me invitaba muchas veces para que le contara historias de Eva Duarte, a la que admiraba de forma profunda, tanto como yo la admiré. Cuando ya le conté todo cuanto supe de Evita, comencé a inventarme bellas historias de ella, pensando que la señora Indira no se iba a dar cuenta. Un día, la señora Indira me dijo: “ Facundo, te espero mañana para desayunar, espero me sigas contando historias de Evita...., aunque sean inventadas.”

“ La maestra de mi pueblo se llamaba Dorotea. Era muy respetada por todos. ¡ Por eso se marchó del pueblo, para ver si tenía más suerte!

“ Me contaba mi abuela en torno al día que murió Carlos Gardel. Esto ocurría en el año 1935. La noticia fue difundida por la radio. Se hicieron eco todos los barcos extranjeros anclados en el puerto de Buenos Aires. Se pusieron a sonar todas las sirenas al mismo tiempo, alguien dijo que en señal de duelo. ¿ Qué sentiste ante la muerte de Gardel, abuela?. A lo que ella me contestó: “ Caramba, ahora si que somos pobres de verdad¡”.

“ Me sorprendí cuando los periodistas corrieron a la casa de la madre de García Márquez, tras haber ganado éste el Nóbel. Todos estaban deseosos de conocer la opinión de la madre de Gabo, a lo que la señora les contestó: Yo no se nada de literatura, yo sólo sé que el Gabo tiene mucha memoria porque todo eso que escribió se lo contaron. Esto me recuerda al inefable Juan Rulfo, cuando las gentes le pedían, casi le reclamaban del porque no escribía, a lo que él respondió: No escribo porque la gente que me contaba las cosas, se murió.”

“ Si los malos supieran lo buen negocio que es ser bueno, serían buenos, aunque sólo fuera por negocio.”

" Mi abuelo persiguió a las muchachas hasta los noventa años. Pero ya no se acordaba para qué."

" El conquistador por cuidar su conquista, se convierte en esclavo de lo que conquistó. Es decir, que jodiendo se jodió."

“ Un hombre que habla con las palomas no está loco, sino, benditamente enamorado.”
.
“ Estábamos un día en Nueva York y, a la salida del teatro Lincon Center, se me acercó un periodista y me espetó: “ Señor CabraL. Yo estoy de acuerdo en todo lo que usted ha dicho esta noche, excepto en que Dios es siempre justo. Si Dios fuera siempre justo, usted debería tener tanto difusión, tanto éxito como Julio Iglesias.” A lo que yo le respondí: “ Claro que Dios es siempre justo. Julio Iglesias tiene más difusión, más éxito que yo puesto que necesita del dinero mucho más que yo para vivir. Yo, que necesito más libertad que Julio para vivir, por eso Dios me hizo más libre.”

Del espectaculo "Lo Cortez no quita lo Cabral" un monologo de Facundo.










No hay comentarios.: